Eres mío
—Hola, pequeño.—Hola, mi Dueña —contestas sobresaltado, quitándote los auriculares—. No os esperaba hasta esta noche.No, no me esperabas. Lo sé. Lo decidí de repente. Era una pena tenerte en casa toda la mañana y no pasar a hacerte una...
—Hola, pequeño.—Hola, mi Dueña —contestas sobresaltado, quitándote los auriculares—. No os esperaba hasta esta noche.No, no me esperabas. Lo sé. Lo decidí de repente. Era una pena tenerte en casa toda la mañana y no pasar a hacerte una...