Uno de mis fetiches dentro del BDSM es el sounding, también llamado urethral play o sondaje: introducir una cánula o sonda en la uretra, bien para penetrar, bien para estimular desde dentro, o para dilatarla con catéteres de diámetro cada vez mayor.
Esta es una práctica sexual que entra dentro del medical y es considerada de riesgo. Además de una de las que más amor-odio suscitan. Y temor, sobre todo temor.
Pero mucho de ese temor viene del desconocimiento. A ver, que quizá sea un límite para ti y ni te lo planteas. Lo entiendo, porque no es para todo el mundo. Pero, si tienes curiosidad, sigue leyendo y lo mismo te sorprendo y te acaba apeteciendo probar. Aquí os voy a contar mi experiencia, lo que me ha ido bien, cómo llevarla a cabo y las precauciones que se deben tomar.
Únicamente lo he hecho con personas con pene, así que me voy a centrar en eso. Os aviso que no soy experta, solo cuento con mi experiencia y lo que me he informado. Yo os recomiendo que recabéis toda la información que podáis y que os adentréis en esta práctica poco a poco.
En el imaginario colectivo bedesemero, dices sounding y la gente se piensa en algo mucho más duro de lo que realmente es. Porque no se trata de forzar, ni se trata de dañar. Si se hace de forma correcta, la cánula resbala hacia dentro sin trabajo y no es doloroso, sólo molesto. Al menos mientras dura la sesión, pero aviso que es normal que duela al orinar después.
¿Todavía sigues interesado?
Mira que bien. ¡Pues nada, vamos al lio!
COSAS A TENER EN CUENTA ANTES DEL SOUNDING:
ELEGIR LAS SONDAS: Yo siempre he usado sondas de acero inoxidable de alta calidad y buen acabado, para evitar problemas, pero hay otros materiales en el mercado, algunos de ellos más flexibles, como látex y polímeros. ¡Cuidado con las alergias! Os recomiendo empezar con sondas lisas, de diámetro 3 ó 4 mm (máximo 6 mm) y ya iría subiendo poco a poco con el tiempo, si lo que se quiere es dilatar.
Nunca utilicéis cualquier cosa que tengáis por casa para este menester. Mirad, que somos muy de bricosado y en otras prácticas vale, pero para esto no. Primero porque no puede haber bordes, las sondas son romas. Y segundo que si se usan objetos que no están pensados para este fin se pueden partir o dejar restos en la uretra. He conocido gente que usaba bastoncillos de los oídos, agujas de crochet o cables de auriculares. No, por favor, NO.
Además de las sondas, existen plugs uretrales para juegos más prolongados. E incluso CBs que los llevan incorporados. Podéis probar qué os gusta más y se adapta a lo que buscáis.
ESTERILIZADO: Yo suelo hervirlas antes de usarlas (¡esperad luego a que se enfríen!). Y me lavo las manos como si fuera a entrar a quirófano. Uso guantes estériles de vinilo para manipularlas. En serio, gentes, el riesgo de infección del tracto urinario es muy alto con esta práctica, incluso tomando precauciones. Si lo vais a hacer, hacedlo lo mejor posible.
LUBRICANTE: Esto es importantísimo. Usad uno médico, estéril y soluble en agua, que no daña los instrumentos y es específico para estos juegos. Los venden online y en farmacias. ¡Y sed generosos aplicándolo!
¿Lo tenemos todo? Perfecto, vamos allá.
¿CÓMO SE HACE?
Lo suyo es esperar a que el pene esté erecto para empezar a introducir la sonda. Pon un poco de lubricante sobre la apertura de la uretra y mucho más en la cánula. Lo colocas en vertical y lo introduces DESPACIO Y SIN FORZAR. Verás que, cuando lleves unos centímetros, si lo sueltas, va entrando solo. Eso es que vas bien. Lo mismo debes hacer un poco de presión, pero no mucha. Si necesitas forzar es que algo va mal. Si no te lo estás haciendo a ti mismo, debes asegurarte en todo momento de saber cómo está la persona que lo está recibiendo. Y detener la práctica si te lo pide o algo no va del todo bien.
PRECAUCIONES: La uretra de las personas con pene mide unos 18-20 cm. ¡Cuidado de no introducir tanto la sonda que no la podáis sacar! Dejad siempre un mínimo de 3 cm fuera. Si os da miedo, podéis usar una que viene con un arito que sirve tanto como tope como para tirar de ella y sacarla.
En caso de que la hayáis metido demasiado, que no cunda el pánico. Que la persona se ponga de pie y esperad a ver si, con el pene flácido, podéis sacarla. Si no es así, entonces tendréis que ir al hospital.
Yo lo he hecho cientos de veces y nunca ha pasado nada. Solo hay que tener un poquito de cuidado y estar pendientes.
¿Te puedes masturbar con la sonda? Sí, aunque a menos que tenga un conducto para que salga el semen, debes sacarla para poder expulsarlo. Pero déjame que te avise de algo: cuanto más muevas y manipules la sonda mientras está dentro (movimientos mete-saca, masturbarse, etc.), más te dolerá a la hora de orinar después. Y más riesgo de que haya pequeños desgarros, sangre en la orina, etc. Así que en serio, gentes, empezad poco a poco.
BUENO, YA HEMOS JUGADO Y TAL. ¿ALGUNA COSA MÁS QUE DEBAMOS SABER?
Pues sí. Y es que, aunque hayamos cuidado la higiene durante todo el proceso, sería bueno que, al terminar, orinaras. Así te puedes llevar restos de lubricante, y más importante, de bacterias que hayan podido entrar en el tracto urinario.
Dependiendo de la intensidad del juego, orinar puede desde molestar a provocar un dolor intenso todo el día. Es lo normal. Ese es uno de los motivos por los que yo recomiendo empezar muy poco a poco con esta práctica e ir aumentando la firmeza, profundidad y ejecución si os van gustando las sensaciones, veis que no os causa problemas y lo podéis llevar bien.
Hay gente a las que esta práctica les estimula sexualmente en sí misma y otra que le encuentra más sentido en una D/s, como ofrenda, humillación o entrega. En mi caso me hace sentir muy dueña de la persona a la que se lo hago. Penetrar donde nadie lo ha hecho antes, mirarle a los ojos mientras lo hago. Incluso mezclarlo con otras cosillas, como pegging o vibradores anales. Hay muchísimas opciones.
Así que ya sabéis. Si os interesa, valorad los riesgos y decidid en consecuencia. Y si ya lo habéis hecho o si os animáis a hacerlo después de leerme, me encantaría conocer vuestras experiencias.
