FinDom

Cuando me creé mi cuenta en Twitter uno de mis primeros tuits fue “¿Pero ahora hay findom?”

Yo no he visto ni el origen, ni la proliferación de dicha actividad. Lo que me he encontrado al volver al BDSM es una práctica tan extendida que eclipsa todo lo demás, hasta tal punto que parece que no hay otra cosa dentro del FemDom. Y eso, choca. Y choca mucho.

Me di un paseíto y me encontré con cientos de perfiles pidiendo dinero y tributos a los sumisos a base de insultos. Y como mi nick y foto eran lo suficientemente ambiguos, a mí también me entraron por mensaje directo.

Reconozco que no me gustó nada.

¿Por qué no me gustó? Venga, que os cuento los motivos:

1. Por cómo se lleva a cabo. Es decir, insultando y humillando públicamente y de forma genérica a los posibles fetichistas financieros, y de paso arrastrando a todo el rol sumiso con ello, sin ningún tipo de venia. Me pareció, valga la redundancia, humillante y degradante para todo el rol. Entiendo que es parte de la estrategia para atraerles, ya que muchos de estos sumisos tienen marcadas fantasías de supresión, de degradación y humillación. Pero personalmente estoy en contra de involucrar a nadie en dinámicas BDSM sin consentimiento previo. Y mucho más de generalizar.
2. Por el postureo. Las personas están en la mayoría de los casos directamente “en rol” y siempre “en rol”. Las peticiones se hacen “en rol”, desde una posición dominante. No se sabe qué es real y qué es pose. Confunde a la gente nueva. Confunde hasta a los que llevaban tiempo, como yo. Tampoco se sabe qué es verdad o mentira. Todo es “rol”, no parece que haya un sentarse a poner las bases del juego con sensatez, ni un conocerse ni nada, como sería lo lógico para cualquier otra relación o práctica BDSM.
3. Porque, en muchos casos, se mezclan conceptos. Relaciones y transacciones o juegos puntuales. Parece un popurrí. No deja claro qué es y qué se puede esperar. ¿Es finfet? ¿Son relaciones D/s? ¿Dominación profesional?
4. Contestaciones maleducadas. DMs no solicitados pidiendo dinero.

El tiempo fue pasando, y tuve que aceptar que las cosas eran así ahora. A veces me hablaban sumisos que “habían sido arruinados” por esta práctica y me recordaban al caso de un amigo, de hace años, y simpatizaba con ellos. Simpatizaba sin pensarlo mucho.

Yo escribía hablando de malas praxis, de tener cuidado con los timos, de que buscaran a la persona adecuada. Y de que la entrega nubla… La verdad, seguía sin gustarme nada.

Y leía a más gente contra el findom. Pobres sumisos. Qué malas las mujeres dominantes, que sólo quieren dinero.

Y los meses pasaron, y más pobrecitos los sumisos. Y siempre las distinciones, que si los sumisos de verdad, que si los pajilleros o feticheros. Y a mí algo me empezaba a rechinar, algo no me cuadraba del todo. ¿Qué era?…

Porque lo piensas y te das cuenta que en principio nadie obliga a pagar a nadie. Que ellos siguen el juego muchísimas veces, oye. Les hacen RT. Y ayudan a difundir.

Además, muchos sumisos daban excusas que me recordaban demasiado a esas teorías machistas de “los hombres no se saben controlar”. Claro, claro: por eso violan, abusan, hay acoso callejero o existen las manadas y somos las mujeres las que debemos tener cuidado de no beber, no ir vestidas de tal manera, no ir por sitios peligrosos o solas…

Y mira, por ahí no paso. Los hombres saben y pueden controlarse perfectamente, si quieren.

Al mismo tiempo, todo esto me parecía bastante complementario a cómo se me presentaba la mayoría de los sumisos desde que empecé en FemDom en los años noventa. Curioso ¿verdad? Pues os lo cuento también, que no quede.

Exactamente, a mí me llevan entrando así los sumisos desde siempre. Desde mucho antes que el mal llamado findom se generalizara:

1. Humillándose y degradándose sin que haya mediado palabra antes y generalizando a “los sumisos no tenemos derechos, estamos para servir”, haciéndome la pelota de forma descarada y, buscando que yo le siguiera el juego y sus fantasías de supresión, para una… eh… satisfacción rápida. Y muchas veces desaparecían después. Y cuando necesitaban más aparecían de nuevo, con el mismo nick o con otro distinto. No te decían qué querían. No eran sinceros. Timewasters los llamaban. Entiendo que es parte de su estrategia. Y así me lo tomaba, qué remedio.
2. Directamente en rol y siempre en rol. No sabía qué era real o pose. Verdad o mentira (y creedme cuando os digo que el 90% de las veces todo era mentira).
3. A mis veinte años, más confusa que yo no había nadie. Al menos hasta que me situé y aprendí “el juego”. Sí, para la inmensa mayoría era un juego y para ellos yo estaba aquí para hacer mi papel, aunque les dijera que buscaba otra cosa. Eso a ellos no les importaba. Si tenían que engañarme, lo hacían sin pudor. De hecho lo hicieron docenas y docenas de veces.
4. Contestaciones maleducadas. DMs tratándome de trabajadora sexual, mandándome fotos de sus genitales, llamándome puta, guarra, perra. Acosándome una y otra vez. Pidiéndome lo que tenía que hacerles. Ofreciéndome dinero por hacérselo…

Así que pensándolo con calma y teniendo en cuenta cómo me han entrado y tratado la mayoría de los sumisos, no me extraña demasiado el giro que han acabado tomando las cosas.

¿Qué diferencias hay entre el findom y el finfet?

El findom: viene de Dominación Financiera. En el BDSM “clásico” consistía en controlar las finanzas del sumiso. Ni más ni menos. Control, no donación de dinero.

Y en principio eso es lo que sigue significando, de manera oficial. Oficiosamente no sé muy bien lo que es. La mayoría de las veces se confunde con el finfet, y en ocasiones con los “tributos de criba” o prácticas como el ballbusting o incluso con venta de ropa o calzado, con creación de contenido erótico o fetichista y con la dominación profesional.

El finfet: es un fetiche en el que la excitación sexual o el placer se obtiene a partir de dar o recibir dinero y a veces regalos. Muchas veces acompañado de insultos, humillaciones y vejaciones. Y suele venir de la mano de otras fantasías de supresión.

Así que la dominación financiera original es ahora minoritaria y en Twitter y otras redes sociales lo que más se ve es finfet, aunque se le llame findom.

Hechas las aclaraciones, vamos al lio:

¿Es algo malo el finfet?

No. Como cualquier otro fetiche, si a una persona le gusta o le da placer entregar una cantidad a otra y ser humillada por ello, mientras sea consensuado, todo bien.

No somos nadie para juzgar las preferencias sexuales ni las prácticas de los demás, mientras entren en la legalidad y se hagan desde la libertad personal, sin coacciones.

¿Dónde veo yo los problemas?

Bueno, al tratarse de dinero, que es algo que todos necesitamos, y todos queremos, la cosa se complica bastante. Nadie o casi nadie que no tenga un fetiche de pies va a practicarlo, pero el dinero es bien recibido por todo el mundo. Tenga o no el fetiche.

Y si fuera hay timos, engaños, manipulación, robos y extorsiones, dentro también. Somos las mismas personas que conforman el resto de la sociedad. Pero ojo, que esto no sólo pasa con el finfet y el findom. Lo he visto docenas de veces en relaciones BDSM de todo tipo. Incluso entre conocidos, sin necesidad de que haya relación. Así que tened cuidado.

Además, algunos practicantes de finfet denuncian que tienen adicción a dicha práctica. Y una persona con adicción, al igual que pasaría con una persona ebria, inconsciente o drogada, no puede dar un consentimiento legal y válido. Por lo que no habría consenso ni libertad personal real.

¿Qué sería necesario entonces, para practicar finfet de forma segura?

Pues primero informarte bien, tanto de lo que realmente quieres hacer, como de los riesgos. Y sobre todo no tengas prisa. Y ten presente que lo más importante es el “con quien”. Necesitarás una persona con ideas similares y complementarias a las tuyas y que sea de confianza. Pide ayuda a la comunidad si te hace falta.

Debes tener también claro si quieres algo ocasional, sin compromiso o una relación a largo plazo. Y el nivel de implicación que quieres tener con esa persona.

Fija tus límites. Los límites tienen que ser respetados SIEMPRE, al igual que pasaría con cualquier otra práctica.

No lo hagas bajo efectos de drogas o alcohol.

Recuerda: si te sientes presionado o te manipulan para dar más de lo que quieres y puedes, ahí no es. Nadie te puede decir que no eres sumiso por fijar límites, por no querer hacer findom o fintet ni por ninguna otra cosa.

Y, sobre todo, si está afectando a otras etapas de tu vida: familia, amigos, trabajo, ocio… párate y piensa si no tendrás una adicción. Si crees que tienes una adicción busca ayuda urgentemente y procura alejarte, en la medida de lo posible, de RRSS y tentaciones.

Además, ten presente el dinero hace falta para vivir: nunca tributes por encima de tus posibilidades. Haz tus números, aparta los gastos, ahorra para imprevistos. Ten un presupuesto real y sensato y cíñete a él.

Y luego escucho historias de sumisos arruinados por Dommes. Me consta que hay casos así, suelen ser de timos y abusos, claro que sí.

Pero otras veces es que no hay un presupuesto hecho, ni un límite marcado, ni un saber lo que llevan gastado. Y lo mismo es hora de empezar a responsabilizarnos de nuestros actos y practicar de forma segura, como adultos responsables que se supone que somos. Es como con cualquier otra cosa que te guste hacer, o comprar. Si te gastas más dinero del que tienes en ropa de marca, te vas a arruinar. No podemos pedirle responsabilidades a Ralph Lauren.

E insisto, si están manipulándote o no te dejan salir del rol para hablar las cosas, te digo lo que le diría a cualquier otra persona en cualquier tipo de relación BDSM abusiva: sal de ahí sin mirar atrás.

Por último, indicar que los riesgos no sólo son para el fetichista financiero o sumiso. Ambas partes deben tener en cuenta cosas como que los datos personales que se revelen se pueden usar para chantajes y extorsiones. Siempre hay que tener cuidado con dar tu nombre, dirección, información bancaria, etc. Y que las mentiras y engaños no son exclusivas de un rol u otro. Que hay perfiles falsos. Personas que van a aprovecharse. Así que cuidaos mucho. Vamos a intentar hacer un BDSM bonito y seguro para todo el mundo.

Me gustaría además agradecer la ayuda de @Princesafetish que me ha aclarado algunas dudas que tenía sobre estos temas. Si os interesa el finfet y findom y lo queréis realizar de forma segura, ella tiene hilos muy interesantes y sensatos que os podrán ayudar. Os recomiendo que la sigáis en Twitter.